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En un esfuerzo por fomentar la postulación a fondos públicos, cinco estudiantes de la Facultad de Ingeniería, postularon al “XIV Concurso de Valorización de la Investigación en la Universidad”, convocatoria 2024 financiada por FONDEF, institución que contribuye al aumento de la competitividad de la economía nacional y al mejoramiento de la calidad de vida de los chilenos.

El XIV Concurso de Valorización de la Investigación en la Universidad 2024 de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo de Chile – ANID, tiene como principal foco que alumnas y alumnos sean movilizadores del conocimiento hacia instancias más productivas o sociales.

En esta oportunidad, y con el fin de fomentar una cultura de emprendimiento innovador en la comunidad universitaria, basada en la valorización de la investigación científica y/o tecnológica que se realiza en las instituciones de educación superior por estudiantes o egresados de pregrado y postgrado, la Unidad de Proyectos de la Facultad de Ingeniería junto a la Unidad de Emprendimiento de la Vicerrectoría de Investigación y Postgrado (VRIP UBB), colaboraron en cinco postulaciones lideradas por estudiantes de la Facultad.

Entre ellos se destacan los siguientes:

Financiamiento para impactar

Este instrumento que promueve la formación de capacidades para desarrollar nuevos emprendimientos, negocios o empresas, ha sido transcendental para aquellos agentes que buscan impactar en la comunidad por medio de iniciativas que beneficien tanto a las personas como el entorno donde vivimos.

Tal cual es el caso de Roberto Aedo, docente del Departamento de Física y estudiante del Doctorado en Ingeniería UBB, quien enfocó su proyecto en el estrés hídrico. Para ello, pretende generar modelos que integren toda la información disponible, incluyendo variables que permitan analizar el subsuelo para hacer pronósticos y estudiar futuros eventos más complejos debido al cambio climático. “Lo que pensamos con estos modelos es apoyar a la toma de decisiones y a las futuras leyes. También queremos incentivar a las personas que hoy existen empresas que manejan de manera más eficiente el recurso hídrico”, señaló.

Por otra parte, el estudiante de Ingeniería Civil Química, Jean Germain, cuya iniciativa trata de aplicar estrategias para reducir el volumen de basura en Hualpén, a través de la producción de un químico que aporte a la economía circular, indicó que busca diseñar una deshidratadora innovadora que gaste menos electricidad y mejore la salud de las personas. “Al inicio mi proyecto era antihongos, ahora avanzó a una etapa de ser antibacterias”. Asimismo, el emprendedor afirmó que desea que la comuna se transforme en una más rica y sustentable, con la posibilidad de exportar esta solución a otros sectores y regiones.

Mientras que, el egresado de Ingeniería Civil Mecánica, Felipe Beltrán, valoró la existencia de una oportunidad de desarrollo en su área mediante su proyecto que aspira a optimizar las propiedades mecánicas y tecnológicas. En ese sentido, estableció que su disciplina le abrió las puertas para innovar y crear nuevos materiales de la mentoría de los académicos del Departamento de Ingeniería Mecánica, los doctores Guilherme Neves y Christopher Salvo.  Del mismo modo comentó que “las oportunidades que brinda el área de ciencia de los materiales son bien amplias, ya que se crece como persona y hay un ambiente cultural, puesto que se trabaja de forma colaborativa con más países, por lo que existe un enriquecimiento de conocimiento”.

Testimonios que inspiran

Una idea de proyecto que ha revolucionado la industria y que busca una segunda visión es la del destacado Erick Rozas de Ingeniería Civil Mecánica, quien ha decidido nuevamente postular a los fondos VIU mediante un dispositivo autónomo que permite combustionar pellets de biomasa para calefaccionar recintos domiciliarios sin la necesidad de requerir electricidad.

Su idea, que surge con la necesidad personal de potenciar su emprendimiento, consiste en construir un calefactor a pellet que tenga bajos niveles de emisiones, alto rendimiento térmico, autonomía eléctrica y que adicionalmente sea removible entre temporadas. “La primera postulación tuvo inconsistencias que se corrigieron gracias a la obtención de resultados experimentales, se dio énfasis en las debilidades y se reforzaron gracias a la retroalimentación de la evaluación de la primera postulación. El apoyo y confianza por parte de mi profesor guía y de los ingenieros de proyecto, fueron clave para aumentar la motivación de repostular”, realzó el estudiante.

En este sentido, Rozas aconseja a los estudiantes a vivir la experiencia con responsabilidad, ya que “en primer lugar, deben conocer bien las bases de la postulación, esto para comprender el enfoque correcto que le deben dar a su proyecto, pero principalmente es que tengan una visión y metodología clara del desarrollo que buscan alcanzar en sus proyectos con los fondos VIU. También es importante confiar en el apoyo que entrega la Unidad de Emprendimiento a través de sus profesionales”, puntualizó.

Mujeres emprendedoras

Otra solución que inspira a las futuras generaciones es LODOMAX, una tecnología de aletas y paneles reflectantes compuesto principalmente de aluminio que busca disminuir el tiempo de secado de los lodos y/o compost mediante la transferencia de calor por radiación solar.

Este proyecto elaborado por la estudiante Marisol Morales de Ingeniería Civil, destaca por sus bajos costos al innovar en su diseño, uso de energía natural y material aplicado, además de que puede adaptarse a distintas escalas y capacidades, haciéndolo versátil. Como resultado del proceso se obtiene un subproducto el cual es aprovechable por suelos erosionados y agrícolas y hasta reconstituye el ciclo hídrico, convirtiéndolo en una solución sostenible en el tiempo.

Cabe mencionar que lo anterior no sería posible sin el rol femenino ingenieril, quienes son esenciales para solucionar problemáticas reales. Es por esto que es importante fomentar el interés y la motivación de las mujeres en proyectos de investigación e innovación en ingeniería, ya que, al promover la participación activa de las mujeres, se crea un entorno más equitativo donde todas las personas tienen la oportunidad de desarrollar su potencial y contribuir con sus habilidades. Del mismo modo, enriquece la calidad y efectividad de las propuestas al incorporar una diversidad de perspectivas y conocimientos.

“Estos proyectos representan una oportunidad invaluable no solo para demostrar habilidades técnicas y académicas, sino también para establecer vínculos y redes de contacto, desarrollar habilidades sociales, mejorar en liderazgo y comunicación efectiva, entre otras. Nos permiten enriquecernos tanto a nivel profesional como personal”, aseveró Morales.

Desde la Unidad de Emprendimiento de la Universidad del Bío-Bío, se agradece la invaluable labor de las profesionales Solange Sepúlveda y Camila Sáez, quienes ayudaron y acompañaron en todo el proceso de postulación. Al respecto, Sepúlveda reflexionó que postular a financiamientos públicos, como los proyectos FONDEF VIU, impacta significativamente a los estudiantes de pre y postgrado al fomentar la cultura de innovación y emprendimiento, expandir habilidades prácticas, y facilitar la vinculación con el sector productivo y social. “Estos proyectos impulsan la creación de nuevas empresas de base científico-tecnológica que abordan problemáticas regionales, nacionales e internacionales. Estas empresas no solo generan soluciones innovadoras a desafíos específicos en diversas áreas como alimento, medio ambiente, y tecnología, sino que también contribuyen al desarrollo económico y social de sus comunidades”.

Agregando que, al enfrentar problemas reales y relevantes, estas iniciativas potencian la aplicación práctica de la investigación académica, transformando ideas y descubrimientos en productos y servicios que tienen un impacto tangible en la sociedad. “Los proyectos permiten la transferencia de conocimiento y tecnología, fortaleciendo la colaboración entre la academia, la industria y posicionando a nuestra universidad como líderes en innovación y desarrollo”.

Próximos desafíos

Otro aspecto importante para alcanzar los objetivos es el rol de las futuras generaciones de investigadores, pues ellos tienen la capacidad de visualizar y entender el camino con el fin de resolver problemas cada vez más complejos. Por lo que, desde una mirada académica, se debe fomentar una cultura de emprendimiento e innovación en la comunidad universitaria. “Necesitamos personas que generen valor y trabajo a través del emprendimiento. Hay muchos mecanismos de financiamiento, ya sean estatal o privados para potenciar muy buenas ideas, por tanto, es esencial que las universidades sean parte de la formación de los estudiantes”, resaltó Roberto.

En la actualidad, los estudiantes están a la espera de su defensa de proyecto, sin embargo, dentro de sus expectativas están en poder seguir fabricando soluciones en pos de la ciudadanía. Finalmente, los postulantes agradecieron a sus familiares, amigos y a la Unidades que, gracias a su apoyo técnico, hicieron posible las postulaciones. “Busquen la innovación, sean perseverantes y no tengan miedo”, concluyó Felipe.