Colaboradores de la Facultad de Ingeniería UBB participan en conversatorio sobre neurodivergencia, discapacidad y trabajo
Este encuentro abordó los desafíos que se generan para lograr la conciliación entre la vida laboral, personal y familiar en contextos de discapacidad o neurodivergencia, además de identificar las barreras existentes y explorar posibilidades desde la acción individual y colectiva.
A mediados de junio, en la Sala de Postgrados de la Facultad de Ingeniería de la Universidad del Bío-Bío, se realizó el primer conversatorio dirigido a las y los trabajadores de la Facultad de Ingeniería, con roles académicos o administrativos reconocidos como neurodivergentes, con discapacidad o cuidadores de personas en esta situación.
La neurodivergencia, que trata de cómo una persona se relaciona con el mundo de manera distinta a lo establecido en la norma, debe comprenderse y reconocerse para entregar una experiencia educativa más inclusiva, adaptando métodos de enseñanza y percepción en beneficio de los individuos.
Un ejemplo claro son los profesionales que cumplen labores en el establecimiento de educación superior, siendo los principales protagonistas de esta dinámica jornada. Al respecto, la Coordinadora de Inclusión de la Facultad, Jessica Jerez Yáñez, expresó que la actividad es considerada una oportunidad de desarrollo, por lo que deben existir herramientas o experiencias más adecuadas para la vida laboral de quienes se desempeñan en la institución.
“Una de las situaciones que observamos en el Diagnóstico de Inclusión ejecutado el año pasado fue que existían personas del mundo docente y estamento administrativo que tuvieron que acomodarse y ajustarse, a pesar de ser neurodivergentes o tener discapacidad”, señaló. Agregando que el motivo de este primer acercamiento consistió en poder conocer sus pensamientos y necesidades, mediante la orientación y escucha activa.
Llamado a la acción
Bajo este alero, y con el objetivo de impactar en la formación y proceso creativo, es importante brindar mejores condiciones para un óptimo ejercicio ocupacional. Una de ellas es la conciliación entre las tres áreas, puesto que al implementar acciones se otorgarían mayores posibilidades a un trabajo respetuoso y diverso. No obstante, es indispensable el apoyo, ya que en caso de que una persona tenga neurodivergencia o discapacidad su forma de responder a la demanda laboral es diferente.
En este sentido, algunas de las iniciativas que se pueden aplicar para afrontar los desafíos actuales son; darle visibilidad a una realidad que hasta ahora estaba oculta en la Facultad y en la Universidad en su conjunto; lograr recoger propuestas concretas de estos espacios de conversación y hacerlas llegar a las instancias que corresponden; asimismo, pensar en recomendaciones para los equipos de trabajadores. «La idea es que podamos operar en los distintos planos, en lo relacional en cómo entre todos podemos construir una comunidad más respetuosa a la diversidad, y en la institucionalidad en base a las garantías que se elaboran”, valorizó Jerez.